O el nuevo embajador de Israel, Ilan Sztulman (foto), vive en Babia (o, como es nacido en Brasil, dentro de una caja de Bon-O-bon) o es un desfachatado, y todo indica que lo correcto es lo segundo ya que se puso a decir categóricamente que en la Argentina hay “células dormidas de Hezbolá”, sonsonete con el que se duermen las células de los cerebros de los distraídos desde hace casi un cuarto de siglo. Y no sólo que las hay, sino que ellos (Israel) han ayudado a detectarlas (¿otra vez van a ponerse a jorobar a la gente de la mezquita de Floresta) y que está contento porque la investigación del atentado a la Embajada de Israel avanza (?). Vale recirdar queIsrael jamás se presentó como querellante en la causa abierta por la demolición por bomba de su antigua embajada, un petit hotel situado en la esquina de Arroyo y Suipacha, e hizo todo lo posible para que no se investigara. De hecho, la investigación está paralizada desde fines de 1999, cuando asumió Fernando de la Rúa en reemplazo de Carlos Menem y la “mayoría automática” de la Corte Suprema (con las disidencias de Enrique Petracchi y Agusto Belluscio) se plegó a Carlos Fayt (que se había dado vuelta como una media, tal como expliqué en El Caso Nisman: Secretos inconfesables) y en una absurda “acordada” (que no es un fallo) acusó por aquel bombazo a una inexistente “Jihad Islámica” de la que dijo que era “el brazo armado” del Hezbolá libanes (un ridículo porque Hezbolá es una organización político-militar-social-religiosa además del mayor partido político del Líbano y todo el mundo sabe que su brazo militar se llama… Hezbolá). Desde entonces  (y durante muchos años debajo del trasero del secretario especial Esteban Canevari, cuya misión era que nadie metiera las narices en el expediente) la presunta investigación no avanzó un ápice, e Israel jamás la impulsó, antes por el contrario, la boicoteó. Hasta el punto de haber impedido que volviera a Buenos Aires a prestar testimonio el jefe del Departamento de Explosivos de la Policía de Tel Aviv, Jacob Levy, que habia estudiado los efectos de aquel bombazo sobre el terreno y había concluido que la supuesta camioneta bomba (una Ford F-100 verde con techo blanco de propiedad de un fotógrafo de la Policía Federal) jamás había existido.

Sztulman dice que ahora la investigación avanza (?) por lo que colijo que tiene esperanzas de que se someta a algunos iraníes a un adefésico “juicio en ausencia” (ver post anterior) , de manera de cerrar la causa con una condena simbólica.

Gracias a Sztulman nos enteramos que hace mes y medio Patricia Bullrich le advirtió a Israel sobre “operativos de Hezbolá” que se iban a desarrollar aqui, en la Argentina (y de los que muy curiosamente aqui nunca nos enteramos). Por las dudas y aunque nadie le preguntó nada, el embajador se apresura a lanzar un bolazo tamaño Zeppelin: que Israel carece de “una estructura de Inteligencia en América del Sur”. Lo cierto es que no necesita tener demasiado por fuera de una AFI y un Ministerio de Seguridad totalmente colonizados por el Mossad y el Shabak o Shin Bet. JS

Ilan Sztulman: “Israel ayuda en la detección de células terroristas”

El embajador israelí calificó a Macri de “aliado” en materia de seguridad; posible visita de Netanyahu

POR MARTÍN DINATALE / LA NACIÓN

Para el flamante embajador de Israel en la Argentina, Ilan Sztulman, “con el gobierno de Macri la Argentina se convirtió en un aliado muy importante de Israel, no sólo en el plano de las relaciones bilaterales, sino también para los debates en foros multilaterales”. No son las únicas definiciones que dará el nuevo embajador israelí. También Sztulman dirá: “En la Argentina se sabe que hay células terroristas y para ello estamos colaborando muy fuerte con información de inteligencia para ayudar al Gobierno”. Y un dato no menor: confía en que el año que viene visitará el país el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para reunirse con el presidente Macri, ya que “la relación entre ambos mandatarios es muy buena”.

Sztulman es un hombre que conoce muy bien América latina. De hecho, nació en San Pablo, Brasil, y a los 18 años emigró a Israel. En diálogo con LA NACION, destacó que “con el veto de Macri al memorándum sellado con Irán el Gobierno valoró mucho más el respeto a la memoria de los argentinos que murieron en la AMIA y no cambió esto por un poco más de comercio con Irán”, en clara alusión al gobierno de Cristina Kirchner.

-¿Con Macri se mejoró la relación entre Israel y la Argentina?

-La única forma de tener una buena relación bilateral con cualquier país es fomentar la cooperación. Y tenemos mucha expectativa con Macri en profundizar la cooperación entre la Argentina e Israel. También hay fuerte expectativa en aumentar los lazos a nivel multilateral. En el gobierno anterior, la Argentina tradicionalmente se aliaba en los foros a bloques en los que no estábamos nosotros. Hoy hay un canal de diálogo, lo que no significa que el Gobierno garantice que van a votar todo en favor de Israel. Pero sí hay una garantía de que nos van a escuchar.

-¿Fue clave la decisión de Macri de vetar el acuerdo con Irán para mejorar esa relación?

-Sin dudas el veto del acuerdo con Irán ayudó mucho a mejorar las relaciones. Ayudó porque sentimos que los valores que compartimos en derechos humanos y democracia son los mismos. El gobierno de Macri valoró mucho más el respeto a la memoria de los argentinos que murieron en la AMIA y no cambió esto por un poco más de comercio con Irán. Eso lo valoramos.

-¿Cómo evalúa la denuncia de Nisman contra la ex presidenta Cristina Kirchner sobre el encubrimiento de Irán?

-La cuestión de Nisman es una cuestión interna de la Argentina que sigue su curso en la investigación. No hablamos de eso con el Gobierno. Hablamos del atentado a la embajada de Israel, donde trabajamos para que la Justicia avance.

-¿Es importante para las relaciones bilaterales que el caso de la embajada se resuelva?

-Sí, para las relaciones bilaterales es importante que se resuelva de una vez el caso del atentado contra la embajada. Esto fue un golpe al Estado de Israel, pero también un ataque al Estado argentino. El hecho de que el Gobierno tenga voluntad de seguir investigando es una muy buena señal. Hay un compromiso firme para que esto no vuelva a ocurrir.

-¿Tienen información de la posible presencia de grupos terroristas en la Argentina?

-Hay una cooperación muy fuerte en materia de seguridad e intercambio de información para detectar células terroristas en la Argentina. Nosotros estamos investigando. Se sabe y sabemos que hay células terroristas. Ustedes [por la Argentina] ya alertaron de operativos de Hezbollah aquí hace seis semanas. Lo sabían por datos de Interpol. Nosotros colaboramos en lo que podemos. No es que tengamos una estructura de inteligencia en América del Sur. Para combatir este tipo de terror la única forma que hay es la cooperación internacional.

-¿Cree que el Gobierno debe tomar recaudo en el plan Siria para evitar que haya terroristas infiltrados en los refugiados?

-Tenemos confianza en que la Argentina tiene capacidad para ejercer controles suficientes para evitar infiltrados. Es muy positivo que la Argentina abra las puertas a refugiados sirios que están sufriendo la guerra. Pero hay que tomar recaudos. Para eso existen Interpol y la cooperación internacional.