CUMBRE RUSIA-CHINA. Moscú y Beijing se preparan para una defensa conjunta frente a un ataque de EEUU y sus aliados
En cuanto tenga tiempo, subiré una nota que da motivos muy concretos para la preocupación rusa. Con misiles de última generación de fabricación estadounidenese y obviamente con permiso de Wahington, Kiev ha atacado una estación de alerta temprana en territorio de la Federación. Por lo que se ha informado, Rusia solo tendría dos de estas estaciones, capaces de advertir con tiempo suficiente (para intentar neutralizarlos o disponer una contraofensiva) la llegada de misiles a su territorio. Dicho de otra manera, la defensa rusa ha quedado tuerta ante un ataque de la OTAN, es decir, de Estados Unidos. Y esto sucede cuando el lobby de los dementes de Washington (Milei no está solo) propone ensayar un «ataque preventivo»… ante la certeza de que la declinación de su imperio frente a China es indetenible de otra manera. JS
Una Entente Ruso-China en toda regla en el horizonte

El 18 de mayo el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, informó a la élite de política exterior y de seguridad, en Moscú, de las conversaciones a puerta cerrada que dos días antes mantuvieron en Beijing (Pekín), el presidente ruso Vladimir Putin y su homólogo chino Xi Jinping.
Lavrov dijo que la escalada en el suministro de armas occidentales a Ucrania muestra que «la fase aguda de la confrontación político militar con Occidente» continúa en «pleno apogeo».
No es difícil llegar a esta conclusión cuando el pasado mes de abril el congreso de EEUU aprobó una partida de 61 mil millones de dólares en ayuda militar a Ucrania, que incluye HIMARS, antitanques Javelin, proyectiles de artillería Excalibur, misiles guiados TOW, armas cortas, granadas, vehículos tácticos, chalecos antibalas y minas antitanque, entre otros materiales. En Europa, el gobierno de Suecia anunció un nuevo envío de ayuda militar a Kiev por valor de 7 mil millones de dólares, y el canciller alemán Scholz insta a los países de la UE a fabricar más armamento aceleradamente para que «Ucrania y el resto de Europa puedan defenderse». El último en sumarse a esta nueva oleada de ayuda militar a Kiev, ha sido el gobierno español de Pedro Sánchez, que le suministrará armas por valor de 1.100 millones de dólares, en un acuerdo sin precedentes, firmado esta semana en Madrid durante la visita de Zelensky a la capital del Reino.
El canciller ruso dijo que «los procesos de pensamiento occidental están girando peligrosamente a los contornos de la formación de una alianza militar europea con un componente nuclear. Lavrov señaló que «la doctrina de la OTAN ahora habla de la indivisibilidad de la seguridad en la región Euro-Atlántica y en la región del Indo-Pacífico«. Por todo esto, «tenemos una gran razón para la promoción práctica de la idea de garantizar que la seguridad global comience con la formación de los fundamentos de la seguridad euroasiática«, con la creación de una nueva arquitectura, con un «paraguas común» de todos los «brotes euroasiáticos», dijo Sergey Lavrov.
Los medios estadounidenses se burlaron de la cumbre, con títulos como por ejemplo: «Putin-Xi. El romance florece a medida que comienza la cumbre de Rusia y China. El presidente ruso busca más apoyo chino para la economía de guerra» (Político) y una nota encabezada con saludos inventados entre ambos mandatarios: «Te quiero mucho», «No, yo te quiero más».