Gadafi está apunto de recuperar Bengasi
Ser periodista a veces es peor que prostituirse. Vean sino el triste papel de este corresponsal de El País en Tobruk. No puede dejar de informar que el ejército libio le está dando una paliza a los insurgentes. Y que lo hace invocando el más elemental patriotismo frente a la injerencia de británicos, estadounidenses y franceses. Para contrarrestarlo adjetiva, adjetiva y adjetiva. Se va en saliva. La perla: la descripción del paseo de dos leales a Gadafi armados por Tobruk sin que nadie los interrumpa… En vez de decir que la ciudad está en manos de los leales, sugiere que los tipos están locos.