Por fin salió «La Infamia», libro en el que creo haber demostrado varias cosas. 1) Que Irán no tuvo nada que ver con el atentado a la AMIA; b) Que los servicios secretos israelíes (y la CIA, y una SIDE franquicia de ambos) si tuvieron mucho, muchísimo que ver; 3) Que el Memorandum con Irán fue un intento sincero y valiente aunque quizá no del todo atinado habida la correlación de fuerzas de descongelar la causa AMIA; 4) Que detrás de la denuncia del fiscal Nisman contra Cristina Fernández de Kirchner y el canciller Timerman, además de Israel y los fondos buitres se encontraba Sergio Massa, y 5) que, por ende, el propósito de enjuiciar a CFK y compañía por el memorándum (uan iniciativa politica refrendada por ambas cámaras del Congreso) carece de todo asidero.
Pero bueno, no les doy mas la lata (hasta mañana al mediodía), Simplemente los dejo con la tapa del libro, y un texto –acaso demasiado autoreferencial- que intenta explicar de qué va.
Juan José Salinas ingresó a la causa AMIA como investigador contratado por la propia mutual agredida. Producto de su labor publicó un primer libro en 1997 (AMIA, El Atentado. Quienes son los autores y por qué no están presos) e hizo tres extensas presentaciones ante el inicuo juez Juan José Galeano pidiéndole que ordenara la detención de personas que ya habían sido detenidas poco después del atentado y enseguida liberadas entre gallos y medianoche y a espaldas de la opinión pública, así como que sometiera a indagatoria al entonces médico del presidente Carlos Menem, Alejandro Tfeli (ya fallecido) por considerarlo partícipe necesario. Negarse a sucribir la falaz Historia Oficial (camioneta-bomba con chofer suicida libanés teledirigido por ayatolás iraníes) sostenida contra toda evidencia por los gobiernos de Argentina, Israel y los Estados Unidos y adoptada por la práctica totalidad de los medios le supuso una larga travesía del desierto en el curso de la cual publicó «Narcos, banqueros & criminales. Armas, drogas y política a partir del Irangate» sobre el contexto internacional en el que se habían producido los atentados de Buenos Aires. Salió de ese exilio interior al producirse la muerte del fiscal Alberto Nisman en virtud de haber profetizado que antes de ir a Irán a interrogar a los altos funcionarios persas a los que acusaba sin pruebas, Nisman se suicidaria. Publicó así «Caso Nisman: Secretos inconfesables» en el que se refirió a una serie de asesinatos que se disfrazaron de suicidios y demostró el papel protagónico de policías federales y «plumas» de su servicio de inteligencia en la hechura de ambos atentados, y la complicidad del Shin Bet (Contrainteligencia israelí) en el que demolió la Embajada de Israel. Aborda ahora qb «La infAMIA» las resonsabilidades del Mossad y de una SIDE servil y tributaria encabezada por el ingeniero Antonio «Jaime» Stiuso tanto en la voladura de la AMIA como en el encubrimiento de los asesinos, así como el papel cumplido por una dirigencia comunitaria que, en complicidad con el gobierno ultraderechista de Israel, vendió su alma al diablo. Describe la génesis del abortado Memorandum de Entendimiento con Irán, la denuncia del fiscal Nisman del supuesto encubrimiento liderado por la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner, la complicidad con la misma de Sergio Massa, y la casi inmediata, violenta muerte de Nisman, hechos cuyas secuelas y reverberaciones impactan no menos violentamente en el presente.