Los grupos económicos, en la mira
Una multitud desbordó la plaza de mayo por memoria, verdad y justicia
«Es necesario investigar a los grupos económicos que financieron el golpe»
Los organismos de Derechos Humanos pidieron que se investigue la complicidad civil y empresaria con la dictadura. También reclamaron la derogación de la Ley Antiterrorista. El caso Clarín y Papel Prensa, entre los ejes del pronunciamiento.
Por Claudio Mardones / Tiempo Argentino
Cerca de las diez de la noche, un pedido de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, comenzó a correr el telón de banderas que tapaba el escenario central. Cuando el cielo quedó un poco despejado y la multitud dejó de cantar, arrancó el momento central de conmemoración de los 36 años del último golpe militar. A 20 metros de la Casa Rosada, y rodeados por una multitud, los organismos de Derechos Humanos reclamaron la aparición con vida de Jorge Julio López, que lleva seis años desaparecido, pidieron investigar la complicidad empresarial y civil con la dictadura, y exigieron la derogación de la Ley Antiterrorista, porque «deja la puerta abierta para la persecución de luchadores populares».
Durante un discurso que no superó los treinta minutos, un colectivo de oradores pertenecientes a Madres (Línea Fundadora) y Abuelas de Plaza de Mayo, junto a la agrupación Hijos por la Identidad, la Justicia, contra el Olvido y el Silencio (HIJOS) y familiares de detenidos desaparecidos, señaló la necesidad de investigar la relación del golpe con las empresas que «instigaron, apoyaron y sostuvieron a la dictadura». En la lista incluyeron a Ledesma, Ford, Mercedes Benz, Grupo Clarín, diario La Nación, Acindar, La Veloz del Norte, Astarsa, Fiat, Tensa, Techint, Bridas, Pérez Compac, Alpargatas, Celulosa, la Sociedad Macri (SOCMA), el Banco de Italia, el First Bank of America y Papel Prensa, el consorcio que fabrica casi todo el papel de diario que se consume en el país y cuyos directivos están acusados de delitos de lesahumanidad.
«Entre tantos militares juzgados y apresados, no hay ningún empresario condenado, necesitamos que la justicia avance más y también que las sentencias de Casación para los genocidas sean reafirmadas. Los grupos económicos también fueron la dictadura», leyó Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas, luego que las Madres recordaran que hasta ahora se recuperaron 105 hijos de desaparecidos, que hay 273 genocidas condenados y 875 procesados. «El golpe no habría sido posible sin la complicidad de algunas empresas. Muchas cambiaron de dueños, otras no, pero los militares contaron con el apoyo de los grandes grupos económicos, que hasta prestaron sus instalaciones, logística y hasta listas para el exterminio de trabajadores», dijo la mujer, y luego acusó al Grupo Clarín, propiedad de Ernestina Herrera de Noble y Héctor Magnetto, de impedir la libertad sindical en su principal diario, luego de haber despedido a sus delegados gremiales junto a 107 trabajadores. «Clarín sigue sin permitir la sindicalización. ¿Desde qué lugar salen a hablar de democracia?», chicaneó Carlotto y luego cargó contra la Sociedad Rural Argentina (SRA), dentro de los «otros grupos que destruyeron la industria nacional y el plan económico que masacró a una sociedad entera». Durante ese trayecto del discurso, los señalamientos por complicidad con la dictadura ya habían pasado por el diario La Nueva Provincia, de Bahía Blanca y los periodistas, «Chiche» Gelblung, Mariano Grondona, Joaquín Morales Solá y el extinto Bernardo Neustadt», maestro del empresario Daniel Hadad.
«Pero en la prensa también hubo periodistas que resistieron, como Rodolfo Walsh, que desde la Agencia de Noticias Clandestina (ANCLA) envió una carta a la Junta Militar de la que hoy se cumplen 35 años», se escuchó decir desde el escenario, en referencia a la carta, donde el autor de Operación Masacre, señaló, a un año del golpe: «En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.(..) La política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales (..), al que están ligados personalmente el ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete».
Esa denuncia, le costó la vida, y el señalamiento de su denuncia fue el eje central del reclamo de ayer que, también, incluyó un fuerte repudio a la sanción y promulgación de la ley que amplió a fines del año pasado la norma 26.268, sancionada en el año 2007, que tipificaba los delitos de «asociación ilícita terrorista» y «financiación del terrorismo».
Para los organismos, esa norma «hace retroceder» las conquistas en materia de derechos humanos de los últimos años. «Por eso exigimos su derogación», sostuvieron los militantes de HIJOS, en referencia a la sanción de la ley que contó con el apoyo del oficialismo.
Esa norma fue sólo una parte del amplio reclamo de justicia que incluyó, el fin de la tortura dentro de las comisarías policiales, la persecución de la trata de personas que fue considerado como «otro método de desaparición forzada», el fin del gatillo fácil y la investigación de torturas a conscriptos durante la Guerra de Malvinas.
La lista de la memoria, recordó el crimen del joven Luciano Arruga, a manos de policías bonaerenses, y el décimo aniversario del asesinato de los militantes Darío Santillán y Maximiliano Kosteki. Todos ellos son parte de un reclamo de justicia que todavía no ha terminado.
«Alegra ver a los jóvenes con las banderas»
El jefe de Gabinete de ministros, Juan Manuel Abal Medina, resaltó ayer en la Plaza de Mayo la «sensación de alegría que da ver a los jóvenes que, a lo largo y ancho del país, toman las banderas de la Memoria, la Verdad y la Justicia».
Al participar en el acto central por el 36º aniversario del golpe militar de 1976, Abal Medina señaló que «un 24 de marzo es una sensación dual: toda mi vida recordé a los compañeros que no están, a los padres de mis amigos y a la vez, en estos últimos años, por suerte empezó a combinarse con una sensación de alegría de ver a jóvenes que a lo largo y ancho del país toman estas banderas».
Abal Medina encabezó anoche junto a su familia la columna de militantes de la agrupación juvenil kirchnerista La Cámpora y se transformó así en el primer jefe de Gabinete del gobierno nacional en participar de los actos de conmemoración del 24 de marzo en la Plaza de Mayo.
El mensaje de Cristina
La presidenta Cristina Fernández recordó ayer a las víctimas del terrorismo de Estado. A través de la red social Twitter, la mandataria reprodujo algunos extractos de discursos que Néstor Kirchner había pronunciado en 2004 y 2006.
Cristina dedicó la transcripción a la «memoria de las víctimas de la dictadura, en reconocimiento a las organizaciones de Derechos Humanos que construyeron el concepto cultural de Memoria, Verdad y Justicia y lo mantuvieron vivo, y en memoria del presidente que lo hizo posible».
«Los golpes de Estado padecidos por los argentinos han tenido una larga historia y nunca fueron sólo protagonizados por militares. Sectores de la sociedad, de la prensa, de la clase política, tuvieron su parte cada vez que se subvertía el orden constitucional», fue parte del mensaje que pronunció el ex presidente el 24 de marzo de 2006 y que la mandataria reprodujo en la red social. En la cuenta institucional también destacó la frase de Kirchner que rezaba: «Cuando alguien abría la puerta de los cuarteles para ir en contra de la democracia, previamente habían concurrido otros a golpearlas. Poderosos intereses económicos minoritarios trabajaron incansablemente para deteriorar las instituciones democráticas». Además, recordó la orden del ex presidente de retirar el cuadro con la fotografía del dictador Jorge Rafael Videla del Colegio Militar. En esa oportunidad, Kirchner pidió que «el 24 de marzo se convierta en la conciencia viva de lo que nunca más se debe hacer en la Patria».»Que el 24/3 definitivamente deje en el brazo armado de la Patria, la conciencia que esas armas que orgullosamente portan nunca más pueden ser direccionadas hacia el pueblo argentino», concluyó.