Los «indignados» y la República (desde Barcelona)
Un interesante comentario sobre los hechos que ocurren en España en general y en Barcelona en particular me ha dejado una tal Monse (rrat) en la entrada «El programa de la Puerta del Sol«. Me interesa destacarlo y por eso republico… lo que viene muy bien, digo, lo de «republico» o «repúblico». Porque desde Barcelona Montse liga los hechos actuales con la república derrotada hace más de siete décadas.
Se trata éste de un hecho muy anterior a mi nacimiento que sin embargo ha signado mi vida tanto como los bombardeos a Plaza de Mayo, cuando tenía apenas dos años. O más, porque sin la guerra y la derrota, mis padres no hubieran venido (regresado, en el caso de mi madre) y claro, nunca se habrían conocido en el Laurak-Bat.. Pero me estoy yendo por las ramas. Los dejo con Montse:
Les aporto una pincelada más sobre el movimiento 15-M, de BCN. Se debate hasta las 5 de la mañana, la mayoría luego se va a trabajar o a clase, los que pueden se quedan en la plaza. De día la gente acude a darles su apoyo:familias con sus hijos, docentes y personal sanitario, parados y ancianos emocionados hasta las lágrimas por haber recuperado la fe en la juventud. La simpatía es general, salvo la derecha y la ultraderecha, que claman desde sus tribunas mediáticas» se viene la tercera república», «esto es como el 31» y dicen «tener miedo» etc.
Claman también contra el gobierno socialista porque no desaloja y detiene a los acampados y de estrujan el cerebro intentando descubrir quien es el/los cabecillas del movimiento ciudadano. La verdad es que no hay líderes, y las sensibilidades políticas son diversas: hay gente que vota, gente que no vota nunca, socialistas desencantados, ecologistas, antiglobalización, feministas, independentistas, republicanos…en resumen todas las sensibilidades de la izquierda del siglo XXI. La mayoría son jóvenes con carrera universitaria (desempleados o malviviendo con salarios de becario: menos de lo que cobra aquí por hora una empleada doméstica,así están ingenieros, abogados, periodistas…)gente que ha perdido su trabajo o atrapados por hipotecas impagable; hay estudiantes perjudicados por el aumento de las tasas universitarias y por el famoso plan Bolonia; gente harta de la corrupción desenfrenada que campa por España; el enriquecimiento de los cargos públicos y sus enormes privilegios.
En medio de los recortes al gasto en educación, sanidad, etc, a menudo a continuación, hay sesiones parlamentarias en las que sus señoríasa aprueban aumentarse los salarios. En el Parlamento Europeo ocurre otro tanto.
Lo que se está discutiendo en BCN es muy profundo. Ahora abarca mucho más que lo que planteó al principio Democracia Real.
Creo que en 2001 los argentinos cuando echaron a De la Rua recuperaron su orgullo y su dignidad, aquí después de este mayo los pueblos de España también empezarán a recuperar la dignidad, ya llevamos años de retroceso democrático e involución de los derechos y libertades y muchos nos preguntábamos hasta cuando sólo seríamos unos pocos los que veíamos venir al lobo de un nuevo fascismo bien disfrazado…
Ayer mi hijo me decía «mamá, estamos haciendo la revolución»…y yo creo que la sangre de tantos republicanos que ha regado generosamente este país, y sus huesos que yacen en fosas comunes en los caminos (porque estos «demócratas» no nos dejan ni siquiera enterrar con dignidad) este mayo deben estar alegres de sus anónimas tumbas.
Gracias por dar un espacio a mi crónica amateur!
Desde Barcelona, una «indignada» más. (Se les llama también el «movimiento de los indignados»)
Montse.