PERIODISMO. Josefina Licitra: ¡Basta de sanata!
Pactos de lectura
Una de cal y una de arena. Leí en Tiempo del jueves una intesante doble página sobre El agua mala, el último libro de @JosefinaLicitra. Lleva el título La inundación de Villa Epecuén, crónica de una tragedia anunciada y la bajada «En 1985 el pueblo quedó literalmemnte sepultado por las aguas. Los pobladores se fueron. La periodista y escritora les da voz a los protagonistas de una catástrofe que, aunque se lo niegue con énfasis, se sabía que podía suceder», y en ella la autora responde a la pregunta de «¿Se permite personahes de fición en una crónica?» del siguiente (a mi modo de ver, inobjetable modo):
-No. en esto soy tajante, purista. el límite es que la gente que aparece en el libro tiene que existir en la vida real aun cuando por alguna cuestión legal tenga que cambiar la identidad, esa persona tiene que tener un correlato auténtico. Y que las cosas que una cuenta hayan pasado porque si no es uina trampa. Decir «hago no ficción pero con personajes de ficción que surgen de un trabajo de campo»es tramposo. Porque muchos de los que hacen ficción también hacen trabajo de campo, pero eso es otra cosa. Es un tema de pacto de lectura. Si vas a falsear o construior cosa que no pasaron, es un procedimiento de la ficción, no es que esté mal. Pero es otra cosa. Lo que vos hagas con eso que investigaste es lo que hace que lo tuyo sea fición o no ficción. La crónica siempre es periodismo.
Esta es una distinción que muchos no hacen, empezando por Jorge Sanata.
Pero como? Esta no era una de las fanáticas amigas periodistas de Lanata y Caparros en Critica?