Terragno sobre YPF: «El Estado está en una situación de debilidad»

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Lo manda Caíto con el siguiente comentario:

Comprar la parte YPF de la cual es dueña REPSOL le saldría al Estado Argentino una fortuna (y quizás eso es sea lo que quieren los españoles: vender sus acciones…a muy buen precio e irse…). 

 
Entonces habrá que pensar en algunas otras opciones. Debe haber otras.
 
 
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Publicado en la Revista Debate el 03/02/2012  
"El Estado está en una situación de debilidad"
 
Por Federico Poore

Rodolfo Terragno, ex senador y dirigente radical, analiza la situación de YPF y los distintos escenarios posibles.

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En diálogo con Debate, el ex senador radical Rodolfo Terragno cuestiona la forma en la que se realizó la privatización de YPF y vislumbra la posibilidad de negociar el contrato con Repsol, ya que a la empresa española «no le conviene una confrontación con el Estado argentino».

¿Cuál es su opinión sobre la denuncia del Gobierno sobre cartelización por el precio del gasoil?
Más que una cartelización, YPF ostenta una posición dominante en el mercado, no sé si de manera legal, pero sí muy claramente desde el punto de vista económico. A mi juicio esto tiene un vicio de origen, que es haber privatizado el subsuelo, de manera tal que una sola compañía petrolífera se adueñó de las reservas de un país con la posibilidad de retenerlas hasta que haya menos petróleo y pueda venderlas a un precio mayor. El problema es la forma en la que se privatizó YPF, que era lo que nosotros sosteníamos ante Carlos Menem y Néstor Kirchner. Por otra parte, en materia de venta al público, la competencia nunca es tan dispar en ningún producto como para que a partir de similitudes en los precios podamos decir que hay un cartel. No es que YPF necesite ir a alguna de las pequeñas compañías para hacer un cartel; es autosuficiente para imponer precios.

En este escenario, ¿cómo ve el futuro de la compañía?
Para la empresa no se trata de una cuestión de viabilidad. Repsol maneja precios internacionales, no tiene solamente yacimientos en la Argentina así que puede ver adónde puede estar el petróleo más barato. Creo que no se trata de culpar a Repsol sino a la forma en la que se hizo la privatización: una cosa era otorgar contratos a los privados para explorar y explotar, es decir, la privatización de la gestión; pero otra muy distinta es la privatización del petróleo que está bajo tierra. Arturo Frondizi fue muy atacado por hacer contratos de locación de servicios, pero antes de eso nacionalizó el petróleo: las condiciones podían no ser favorables, se podían criticar los contratos, pero el petróleo que estaba aquí no le pertenecía a nadie más que a la gente. Hoy ninguna empresa puede tener el lugar que tiene YPF, porque es propietaria de los yacimientos. Haberle otorgado semejante poder nos coloca en una situación de debilidad que restringe las chances de la política energética, si bien no las elimina completamente. Se puede crear un Enarsa, pero Enarsa hoy no pasa de ser una PyME.

¿Cuál es la estructura accionaria actual de YPF? Se estima que cerca del 60 por ciento pertenece a capitales españoles y un 25,5 por ciento a la familia Eskenazi. ¿Esto es correcto?
Manejo esos mismos números, aunque no poseo inside information.

En los últimos días comenzó a hablarse de una posible estatización. ¿Cómo ve esta posibilidad?
Si hoy quisiéramos recuperar YPF, la indemnización podría ser sideral. Se puede encontrar la forma de negociar los contratos, pero ¿se imagina el costo que implicaría, al margen de lo que significaría en términos de desconfianza frente a los inversionistas? Uno puede decir «corro todos los riesgos para recuperar esta herramienta», pero ¿cuánto cuesta? Creo que estamos muy entrampados. El Estado puede hacer una renegociación con Repsol para recuperar algunos poderes -a Repsol tampoco le va a convenir una confrontación con el Estado argentino-, pero la clave acá es que nunca tendríamos que haber privatizado de la manera en la que se hizo. Decir «borrón y cuenta nueva» costaría una cifra sideral en un momento en el que no sobran recursos públicos.

¿Vería con mejores ojos un incremento de los capitales nacionales en la empresa?
No es una cuestión de capital nacional o no nacional, sino de que la empresa tiene poder sobre gran parte del suelo argentino. Un empresario nacional no cambia nada.


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