El mensaje de Evita, perdido durante 32 años, prohibido 14 más.
Me pregunta Silvia Valerga si «Mi Mensaje» es un texto que Evita escribió de mano y letra y si estaba firmado. Parece que quiere certificar su autenticidad. Le contesto:
Salvo un par de paginas, las otras aproximadamente setenta cuaritllas están mecanofrafiadas por colaboradores de Evita e inicialadas por ella, tal como pudieron comprobar los peritos caligráficos puestos por la justicia en el jucio en el cual las hermanas de la santa y la editorial Planeta demandaron a Albero Schprejer, el editor de la reedición que yo preparé (porque la primera, hecha por Fermín Chávez, había pasado prácticamente desapercibida) y se publicó en 1997 con un argumento surrealista «Ese texto es apocrifo, pero o si no lo fuera, los derechos serían nuestros».
La justicia falló el texto era auténtico y que los derechos, contra lo expresamente dispuesto por Evita, eran nomás de Planeta, por lo que condenó a Schprejer a pagar las costas (creo que 8 mil pesos/dólares), Y, de hecho, el libro sigue formalmente prohibido en la Argentina para nadie que no sea Planeta, que nunca mostró interés en publicarlo Lo que pasa es que ahora lo publicó La Cámpora. Y Planeta no le va a hacer juicio a La Cámpora (y por lo tanto tampoco a mi gran amigo de la colimba Oscar Travi, que hizo por su cuenta otra edición) y dejar en evidencia urbi et orbi o que objetivamente fue todos estos años (con gran alivio de la mayor parte del justicialismo): la mordaza del testamento revolucionario de Evita.
En síntesis: Mi Mensaje estuvo perdido 32 años (1955-1987) y prohibido 14 más (1998-2012)