Scioli, ¿la nada misma o el caballo del establishment?
Además de la visión conspirativa de Horacio Verbistky (y acaso también del propio Kirchner, no debe ser fácil estar en su lugar y no sucumbir a un poco de razonable paranoia) hay otras, tampoco muy favorables al ex motonauta, aunque con matices.
Muy crítica como ésta de Artepolitica que termina con un «La V era de vuelve».
Y mucho más matizada como la de Eduardo Anguita en Miradas al Sur (que no había leído cuando me puse a criticar la virulenta homilia dominical de HV.
Ver acá:
De la lectura de esta nota de Anguita (que bien puede completarse con esta otra, del mismo autor:
http://sur.elargentino.com/notas/despues-del-fallo-de-la-corte) me parece harto obvio que Néstor Kirchner hizo acuerdos con Scioli, y que esos acuerdos incluyeron darle garantías de que él, Kirchner, no será candidato a gobernador: de ahí su radicación en su Río Gallegos natal. O, lo que es lo mismo, que en principio Kirchner y Scioli parecen haber pactado la reelección de Scioli… lo que a mi no me gusta porque, efectivamente, Scioli parece cada vez más y ante la falta de otras opciones, el candidato del establishment, pero me hace preguntarme ¿Acaso Massa era mejor?
Esos acuerdos todavía no explicitados parecen haberle provocado un ataque a HV, que la emprendió furibundo contra el procurador Da Rocha, Casal y los reformadores del colapsado sistema penitenciario bonanerense, a quienes presenta casi como una viva encarnación del mal. En fin, que aunque no la tengo clara, no tropezaré otra vez con la misma piedra: la conducción de ese movimiento proteico que conocemos como kirchnerismo, va de suyo, está concentrado en manos de los Kirchner (se hacen muchos chistes amargos sobre esto: por ejemplo que ellos son a la vez el secretariado ejecutivo, el comité central y el congreso nacional) y me parece que en este punto, y sin privarnos de dar opinión, hay que dejarle a Néstor, o a Néstor y Cristina, las manos libres. Que no hay que condicionarlos, quiero decir. Ni psicopatearlos, como hacen algunos.