Vecinos de la ciudad pavimentan sus calles por la propia
AUTOGESTIÓN Y AUSENCIA ESTATAL
Me sigo pavimentando
Los vecinos del barrio San Blas, en la Villa 21, asfaltan sus calles sin la menor ayuda del Estado porteño. Noticias Urbanas recorrió el lugar y entrevistó al padre Pepe.
Por Juan Salinas
Fue hace muchos años, acaso un cuarto de siglo, que la Intendencia de la Ciudad anunció que ya no había calles de tierra, que ya todas habían sido asfaltadas o tenían adoquines u otra clase de pavimento. Bullshit. La semana pasada, la noticia llegó a través de la Asamblea Popular de Pompeya: vecinos de la populosa Villa 21, más precisamente del barrio San Blas, están asfaltando calles por las suyas, sin la menor ayuda ni participación del Gobierno porteño. Junto a un recodo, una curva especialmente cerrada del Riachuelo, erigido sobre unas antiguas playas de maniobras del ferrocarril, donde estaba la estación Solá, el barrio pasó en dos décadas de ser campo a un conjunto abigarrado, creciendo alrededor de la pequeña capilla, primero de manera sostenida y luego de la crisis de finales de 2001, francamente explosiva. San Blas es un barrio donde el idioma principal es el guaraní: la mayoría de sus habitantes son paraguayos e hijos de paraguayos pero también hay familias correntinas, chaqueñas y formoseñas. Está reputado como uno de los puntos rojos en materia de seguridad, pero hace una semana, cuando Noticias Urbanas estuvo allí, sólo se veía gente trabajando.
Leer más (ojo, donde dice «caaguazú» debe decir «Caacupé»).