UCRANIA-OTAN. Preocupa a conservadores alemanes la perspectiva de una guerra nuclear si Ucrania ingresa a la alianza
UCRANIA: Su ingreso en la OTAN puede desencadenar una guerra mundial
POR MICHAEL STÜRMER
Si la Alianza arma a Ucrania o la hace miembro de la OTAN, aumenta de manera abrumadora el riesgo de una guerra mayor. Con la sombra de las armas nucleares, es jugar a los dados con el desastre.
Las sanciones occidentales han perdido efecto disuasorio: Putin no piensa en el comercio sino en la geopolítica. Por otra parte, las cosas pueden ir mucho peor entre Moscú y Kiev. Ucrania no puede ganar militarmente y Rusia, puede seguir la escalada con declaraciones y hechos hasta el umbral nuclear.
Peligro de guerra mundial por la incorporación de Ucrania
El secretario general de la OTAN Anders Fogh Rasmussen, conocido por sus palabras duras y declaraciones imprudentes, es una bomba de relojería y un dolor de cabeza para la mayoría de los países de la Alianza. Debería recordar al mariscal de campo prusiano Von Moltke, que una vez advirtió a sus oficiales: «la estrategia dura hasta el primer contacto con el enemigo, después de esto no ayuda mucho».
El gobierno de Kiev se encuentra en una situación catastrófica tanto política como militarmente, aunque las tropas ucranianas tienen a los separatistas militarmente derrotados en el sureste y han frustrado el juego de Putin. Pero los políticos de Kiev han perdido el momento de las negociaciones cuando todavía eran posibles.
Desde entonces, Putin enfrenta la elección imposible entre la derrota indirecta o avanzar por la vía directa. Eligió, sin dejar de operar desde detrás de la escena, la escalada. Ahora habla de «fascistas» y hace comparaciones con el sitio de Leningrado, disfraza políticamente el camino de la negociación y da también señales de advertencia que Bruselas no debe ignorar, ni tampoco deberían hacerlo Washington ni Berlín.
El suministro de armas a Ucrania sería extremadamente peligroso
En esta situación el suministro de armas occidentales a Kiev o incluso poner en juego el ingreso en la OTAN es añadir más leña al fuego. No sólo porque la habilidad política de Kiev hasta el momento ha sido muy limitada y es arriesgarse a hacer entrar en juego a un ilustre desconocido, sino también porque tal estrategia sería conflictiva para la Alianza y en realidad la podría romper. Hasta el momento, los países de la OTAN eran muy reacios a pensar más allá de un patrullaje temporal y una estancia también temporal de tropas en Polonia y en los estados bálticos, y en absoluto pensaban actuar.
El artículo 5 del Tratado del Atlántico Norte prevé asistencia en caso de ataque enemigo a un país miembro, pero no regula la actuación solidaria en caso de emergencia.
Durante la Guerra Fría la presencia de tropas y familias estadounidenses cerca del telón de acero creaba seguridad. Pero la Alianza tiene limitado -como contrapartida de su expansión hacia el este- el estacionamiento permanente de soldados, las armas nucleares y las instalaciones militares.
Aquellos que consideran el artículo 5, como garantía de la paz y una solución para todo, deberían recordar cómo el senador estadounidense John McCain resumió la importancia del artículo hace 20 años en la Conferencia de Seguridad de Münich: «Quiere decir cualquier cosa, desde una respuesta nuclear a una tarjeta de condolencia.»