Godos y maturrangos enmudecieron
Pasadas las diez de la mañana me puse a mirar los diarios españoles, su sección Últimas noticias. Y… nada en El País, nada en El Mundo, nada en ABC, nada en La Razón, un escueto cometario en público y la siguiente nota en El Periódico. Al parecer, el grandioso triunfo de Cristina enmnudeció a quienes se llenan la boca perorando contra los populistas y a favor del neoliberalismo. JS
Fernández de Kirchner gana holgadamente las primarias presidenciales en Argentina
La actual presidenta mejora los resultados esperados y saca más de 30 puntos de diferencia sobre sus rivales
Eso la que la coloca en una inmejorable posición de cara a las presidenciales prevista para dentro de 70 días, porque su previsión era alcanzar el 40% de los sufragios. Sus principales adversarios, Ricardo Alfonsín (Unión Civica Radical y aliados de centro derecha) y el expresidente Eduardo Duhalde, del peronismo disidente, obtuvieron el 13% y 12% de los votos, respectivamente.
Las primarias han sido impulsadas por el Gobierno con el declarado propósito de «comenzar a construir la autonomía de la política del poder económico». Por la fuerza de los acontecimientos, se convirtieron en una «encuesta nacional» con vistas a la gran batalla electoral de octubre. La oposición no esperaba semejante resultado a favor de Cristina Fernández, teniendo en cuenta de que el oficialismo había sido derrotado recientemente en las elecciones de la ciudad de Buenos Aires y las provincias de Santa Fe y Córdoba. En esos distritos, esta vez los números le sonrieron al kirchnerismo de manera inequívoca.
La presidenta solo perdió en una sola provincia, San Luis e incluso remontó su imagen en aquellas zonas donde, en el 2008, se desarrolló el conflicto con los productores agropecuarios.
Voluntad de remontar
Alfonsín y Duhalde felicitaron a la ganadora. Pero ambos coincidieron en que nada está perdido y que los pronósticos adversos pueden ser remontados. Los dos candidatos presidenciales hicieron esfuerzos notables para disimular el impacto de los números. «Creo que estaremos en segunda vuelta», predijo Duhalde.
No muy lejos de sus cuarteles generales, en el segundo sótano del céntrico Hotel Intercontinental de la Ciudad de Buenos Aires, los kirchneristas empezaron a festejar por anticipado. Entre las caras destacadas, estaban las presidentas de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y de Abuelas, Estela B. de Carlotto, así como diversos artistas locales.
El júbilo se tornó éxtasis cuando poco antes de las 21.30 horas, la presidenta subió al escenario. Tras cinco minutos de cánticos y consignas, Fernández de Kirchner consiguió hablar. Y comenzó agradeciendo «a todos los argentinos y las argentinas» el «grado de madurez» demostrado en la jornada electoral, que superó el 75% de participación. «Hoy estamos dando una lección de democracia», dijo, y destacó que «gracias a la Ley de Reforma Política y la de Medios Audiovisuales todos los partidos políticos han podido acceder por primera vez desde 1983 a los programas» de radio y televisión. «Hasta ahora -remarcó- sólo los que tenían más dinero podían comprar publicidad«.
Referencias a Kirchner
La viuda de Néstor Kirchner también tuvo referencias para «Él», como suele referirse al expresidente argentino, fallecido en octubre del 2010, y que se ha convertido ya en un icono del peronismo y sus aliados. «Este proyecto comenzó un 25 mayo 2003 (fecha en que Néstor Kirchner accedió a la presidencia), con trabajo, gestión y convicciones, que permitieron transformar un país devastado», afirmó.
«Es un gran triunfo del amor», dijo la presidenta, toda vestida de negro, al lado de su hija Florencia. «Quiero hacer una gran convocatoria a todas las fuerzas políticas, porque el mundo es un gran tembladeral y los argentinos necesitan de una dirigencia que pueda seguir construyendo los instrumentos que nos permitieron sobrellevar con éxito la crisis del 2008″, dijo.