EL PARTIDO JUSTICIALISTA necesita un programa
Que debe ser elaborado en diálogo con todos los sectores del peronismo, si es que aspira a ser el eje de un gran Frente de Salvación Nacional que evite una peruanización irreversible. Programa que a su vez deberá ser consensuado con los demás partícipes de dicho frente.
Durante largas épocas el Partido Justicialista fue una cáscara vacía. Basta recordar la intervención judicial de 2018 que puso a su frente a Luis Barrionuevo, un delincuente polimorfo. Pero ahora, con la presidencia de la líder supuestamente convicta, ha vuelto a ser la principal herramienta electoral de cualquier frente patriótico que se conforme para evitar que la patria, el patrimonio común, sea desguazado y subastado. De ello deriva la importancia de este breve comunicado, el primero luego de la detención de CFK. Señala que, además de coraje para enfrentar a los enemigos de la nación, es necesario tener «ideas claras sobre el rumbo que tiene que retomar nuestro país». Ergo, el frente de salvación nacional en ciernes necesita un programa. Que, reiteramos, debe ser elaborado con decisión pero sin sectarismo. El primer paso, parece obvio, lo debe dar el PJ.
Lo que pensamos
Semana 23-6 al 30-6
1. Cristina es inocente.
Ninguno de los delitos por los que se la acusa fueron probados en el juicio. Fue un proceso político que no respetó los derechos y garantías de cualquier ciudadano argentino. Personajes a los que nadie puede acusar de kirchneristas como Cúneo Libarona, ministro de Javier Milei, o Rodolfo Barra, Procurador del Tesoro de JM, dijeron que no hay evidencia para condenar a CFK.
La persecución que se evidenció estos días en los intentos por humillar a CFK se vio a lo largo del proceso judicial: no tuvo derecho a un juez natural, fue juzgada por funcionarios judiciales con animosidad manifiesta y un vínculo directo con el ex presidente Mauricio Macri, entre otras irregularidades.
2. La detención de Cristina es parte de la deriva autoritaria del gobierno.
No es un hecho aislado sino parte de una política de persecución contra cualquiera que exprese una idea distinta. Por eso, el gobierno autorizó el espionaje interno, la detención preventiva sin autorización judicial y el ciberpatrullaje. Es un ataque a los derechos y libertades de todos los argentinos.
3. El modelo de Milei se está agotando y termina mal.
Es un modelo económico insostenible que tarde o temprano se cae. Estamos cerca de los dos dígitos de desocupación. Salarios congelados y cepo a las paritarias. Cae el consumo porque la mayor parte del salario se destina a pagar servicios. Cae la industria, la construcción y el comercio. Empiezan a faltar dólares (desde que se levantaron las restricciones, en 45 días se llevaron casi 4.000 millones de dólares, un tercio del 2° préstamo del FMI). Tienen un superávit fiscal trucho, que se explica por lo que le deben a las provincias (cajas de jubilación, financiamiento educativo, obras paralizadas, etc.) y por el desfinanciamiento de la ciencia, la tecnología, la salud, la educación, las universidades, las rutas. Esta historia ya la vimos y termina mal para los argentinos.
4. La proscripción busca frenar cualquier alternativa al fracaso de este modelo.
La detención de Cristina es un mecanismo para evitar la organización de una fuerza que permita volver a proponerle a la sociedad un modelo alternativo. El modelo de Milei no se sostiene porque la gente lo abraza sino porque instalaron la idea de que es el único camino posible, que no hay alternativa. Por eso necesitan que no pueda haber ninguna voz disonante. Porque el gobierno de Milei tiene los pies de barro y los poderes económicos que están acompañando (y aprovechando) este proceso lo saben mejor que nadie.
5. Vamos a volver con más sabiduría, unidad y fuerza.
Tenemos que organizarnos, ser más inteligentes y creativos que nunca. Lo que tiene que volver no es solo una persona o un dirigente. El que vuelve es el pueblo, sus sueños y sus aspiraciones. Para eso va a haber que enfrentar este momento con mucho coraje y con ideas claras sobre el rumbo que tiene que retomar nuestro país. Eso es lo que tenemos que construir entre todos los sectores. No una coalición contra nadie sino una en favor de la Argentina.