Juan Bautista «El Tata» Yofre le agradece a Macri estar desprocesado en la causa que le armó Stiuso, pero Macri no fue quien se enfrentó a Stiuso, sino Cristina.
La pelea entre Yofre y Stiuso es por el amor de la CIA. Mainhard trabajo largos años para la CIA y supongo que sigue haciéndolo. Patricia Bullrich, resulta obvio, satisface los gustos de la CIA y el Mossad.
Trabajé brevemente en Ámbito Financiero en 1985 introducido por la Utpba tricolor (un mes: cuando el Pelado Ramos volvió de un viaje por Europa, oliéndoselo, me rajó). Al tomarme, Roberto García me dijo (parafraseando a Jacobo Timerman) que sabía perfectanente quien era yo, pero que un buen diario no se podía hacer con periodistas de derecha porque había muy pocos buenos y demasiados ágrafos, y que era imprescindible contratar periodistas buenos para las secciones de cultura y política internacional. Y agregó que su experiencia era que los progres solían entrar por el aro de los chivos, dinners, luncheon-tickets y más chivos. Sin embargo, me destinó a Política y mi efímero jefe fue Yofre, a quien le servía de rueda de auxilio, haciendo la re-redacción rutinaria de los despachos de Télam mientras él charlaba con sus fuentes en cafés de los alrededores como el Florida Garden (entonces Ámbito tenía su redacción en el pasaje Carabelas, a metros del obelisco).
Si no tienen nada mejor que hacer y son curiosos, pueden ver este video, en el que Yofre lanza insidias y rezuma resentimiento con el papa Francisco hasta el punto de terminar manifestando su amor y obediencia a la tríada Juan Pablo II – Reagan – Thatcher… y acusando a Bergoglio de servir a una Cuba que «no es un país, es un campo de concenbtración, Cuba es lo peor, cuba está instando a Cuba que permita la instalación de una base rusa». Lo que me hace recordar cuando en un alto del documental sobre la Triple A que rjodó 4 Cabezas (nunca estrenado), estando en su casa, Yofre cometió un lapsus muy sabroso al decir con tono solemne «Yo, como jefe de la CIA»… en lugar «de la SIDE».

Yofre dice que todos o casi todos los políticos, incluido el Papa, están atenazados, constreñidos, compelidos, apretados, por «carpetas». Incluídos Randazzo y Julián Domínguez, y lo cierto es las críticas al gobierno por parte de Randazzo (que se presentaba como la continuidad absoluta del kirchnerismo más intransigente) son inaudibles. Yofre dice que el oficialismo los impulsa para que sean cabeza de lista en la provincia de Buenos Aires a fin de garantizar que el peronismo vaya partido en cuatro. Randazzo debería desmentirlo y no sólo con palabras. JS

La banda de los periodistas espías: «Gracias a Macri, no estamos presos»