Argentinos cipayos y vendepatrias facilitaron la compra por extranjeros de latifundios fronterizos violando la ley. ¿Protagonistas? Procesistas que hoy respaldan a Milei. Villarruel, la que nunca trabajo en relación de dependencia, tiene quien la solvente.

El lujo de lo esencial

POR JUAN ALONSO

Un empresario chileno, Maximiliano Ibañez Bulnes –cuya familia fue parte del golpe de Pinochet y defendió a esa dictadura– se apoderó de 60.000 hectáreas con un glaciar, ríos, lagos y bosques en zona de frontera con Chile en Santa Cruz. Lo que vulnera la Ley de Tierras . Ibañez Bulnes  se aprovechó de un decreto de Mauricio Macri que benefició a las corporaciones extranjeras que poseen millones de hectáreas en la Argentina, donde existe la mayor reserva de agua dulce, gas, y petróleo no convencional del mundo.

De la maniobra participó el estudio Pérez Alati de Buenos Aires. Se trata de familiares de partícipes del golpe a Perón en 1955 que se asociaron en su momento con los Martínez de Hoz (hijos de José Alfredo), Grondona (hijos de Mariano) y Aramburu (el hijo de Pedro Eugenio). Luego extendieron sus sociedades con otros apellidos como O’Farrell y Marval, y participaron en negocios con fondos de inversión extranjeros que compraron el Hotel Sheraton y la franquicia de los hoteles Marriott, entre otros.

La periodista Sara Delgado viene publicando en el diario La Opinión Austral los detalles de la causa que comenzó en 2019 y puede prescribir en 2025 si el Estado Nacional no impide que una sociedad extranjera se apodere de los recursos naturales de la Nación. La causa tramita en el Juzgado Federal 9, Secretaría 18, y la instrucción quedó derivada en la Fiscalía Nacional 1. Ya fue allanado el estudio de los herederos del ex jefe de Inteligencia de la dictadura de Aramburu y Rojas. Sin embargo, Pérez Alati tiene tanto poder como el Partido Judicial y apuesta a dormir este caso, que bien podría etiquetarse como traición a la Patria.

En Santa Cruz hay 5.536 hectáreas en manos de empresas chilenas, 38.000 hectáreas propiedad de alemanes y 47.764 hectáreas controladas por compañías del Reino Unido. Y los usurpadores de nuestras Islas Malvinas y socios de la OTAN también poseen a –través del magnate Joe Lewis– el control total de Lago Escondido en Chubut.

Parecen haber trazado una estrategia. La superficie total que usurpó el chileno Ibañez Bulnes con la complicidad del estudio Pérez Alati es de 1.013 kilómetros cuadrados en zona de frontera en la Cordillera de Los Andes. 554 kilómetros cuadrados quedaron del lado de Chile y 459 del lado de la República Argentina. El directorio de la compañía, según la periodista Delgado, está encabeza por el chileno Ibañez Bulnes, y los argentinos Ezequiel Braun Pellegrini y Jaime y Rafael Smart.

Braun es familiar de ex funcionarios macristas, un apellido ligado a latifundistas de la Patagonia y propietarios de la cadena La Anónima. Jaime Smart, que fue Ministro de Gobierno bonaerense de la dictadura  fue condenado a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad (como la desaparición de Horacio «Chupete» Benavides) durante el apogeo de los secuestros y torturas de la patota del general Ramón Camps y el comisario Miguel Etchecolatz.

El estudio Pérez Alati forma parte del Colegio de Abogados de la calle Montevideo que solventó y promovió la candidatura de Victoria Villarruel de la LLA una negacionista del terrorismo de estado que visitaba a en cárceles y domicilio a los reos Jorge Rafael Videla y Etchecolatz.

El holding de presuntos capitales chilenos –no se puede descartar un probable nexo con el Reino Unido– promueve sus emprendimientos en Torres del Paine con el lema «el lujo de lo esencial». Un beneficio para personas «cultas y de alto nivel adquisitivo». La colonización de la sociedad comienza con la manipulación masiva de las emociones y después con la supresión de los otros. El objetivo es promover el exterminio de los demás y negar el terrorismo de estado para apropiarse de tierras y recursos del pueblo argentino.