VIDAS EJEMPLARES. Hombelina, indicada para mantener el buen humor
Hombelina – 21 de agosto
Monja, 1092-1141
Hermana menor de san Bernardo de Claraval, fue criada entre seis hermanos varones, de quienes no se diferenciaba en nada, o casi. Con ellos competía en los torneos. Con ellos corría tras la presa hasta lograrla. Con ellos montaba los mejores corceles y con ellos recorría las extensas tierras de sus padres. Pero, a diferencia de ellos, que uno a uno habían ido ingresando en la orden de Císter, Hombelina se casó con un hombre rico.
Así, mientras sus hermanos servían a Dios, ella llevó una vida de mundanidad y aparente alegría, secretamente horadada por la insatisfacción. Es que ella quería hacer siempre lo que hacían sus hermanos. Y no habiendo podido hacerse monje cisterciense, finalmente se hizo monja benedictina en el convento de Jully-les-Nonnais, cerca de Troyes.
–Preveo que serás santa –le dijo un día Bernardo.
–¿Cuáles son las señales de esta santidad? –preguntó Hombelina.
–La primera de todas es que has conservado intacto el buen humor. Sigues siendo capaz de reírte de ti misma. Buena señal.
Y ella siguió riéndose de sí misma hasta que el Señor, que ríe último, la llevó a su lado.
Comparte su día con Apolinar, Balduino, Juana Francisca de Chantal, que amaba a todos, aunque muy especialmente a san Francisco de Salles, y Victoria Rasoamanarivo, princesa de Madagascar entregada como esposa a un militar sumamente violento. El matrimonio constituyó para ella un martirio cotidiano, al que consiguió sobrevivir, milagro que le valió ser beatificada por el papa Juan Pablo II en 1989.
Algunas precisiones:
1. En castellano, es HUMBELINA, no Hombelina. Es un nombre de origen germánico
2. NO ES SANTA. Es BEATA, y si en tantos años desde su muerte la Iglesia no la ha santificado quiere decir que nadie se ocupa de su causa, porque no hay milagros en su haber ni hay culto.
3. Era ABADESA, no monja. Eso significa que estaba librada de la dura vida de un convento en el primer milenio: frío, mucho frío, duras tareas, incomodidades y alimentación escasa.
4. Como todas las RICAS, Humbelina, enseguida ascendió a abadesa, en cuanto quedó el puesto libre.
5. La CARRERA ECLESIÁSTICA era en aquella época una carrera profesional, de las mejores que existían. Había que pagar una dote para entrar a la vida religiosa. Cuanto mayor era la dote, más posibilidades de ser santificado. Y si se podía pagar la fundación de una nueva casa conventual, el proceso de canonización era seguro.
6. Su día no es el 21 de agosto. La Iglesia Católica (que algo debe saber de esto, porque estos personajes son «suyos») lo ha establecido el 12 DE FEBRERO.
No hay que retroceder milenios para buscar «vidas ejemplares». No hay que ir a un tiempo cuyas condiciones eran tan diferentes del nuestro que no tiene sentido tomarlos de ejemplo.
¿Quiere dar referentes actuales? Tenemos a San Óscar Romero, «arzobispo, mártir, y defensor de los pobres», asesinado en El Salvador. Su día: 24 de Marzo. La Iglesia lo considera santo porque hace milagros que han sido reconocidos por Roma.
Hay una tríada de atorrantes profetas del liberalismo extremo, » economistas «, autodefinidos como » anarcocapitalistas » y » miniarquistas » que recorren los lupanares y prostíbulos de la tele promocionados como » genios excéntricos » o » gente seria «, que quieren tomar por asalto el Banco Central y se autopostulan para el cargo con el único objetivo de hacerlo mierda …
Milei … Giacomini … Espert …
Profetas, santos o beatos que ahora hablan de catástrofes cuando fueron parte del desastre, hasta hace 2 años.
En fin en Argentina todo es posible …
Hagámoslos mierda nosotros a ellos antes que tal tragedia ocurra.
Comparto Leo