LIBROS – “Perón en Roma” de Ignacio Martín Cloppet

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La aparición de siete cartas inéditas enviadas por Juan Domingo Perón desde Italia, en su estadía como agregado militar entre 1939 y 1941, fue la excusa que tuvo el abogado e historiador Ignacio Martín Cloppet para escribir esta obra, recientemente publicada por Ediciones Fabro.

El libro empieza por las obras anteriores del autor, de reciente publicación y que resume en este volúmen. Una buena parte del libro cuenta la historia de PePeron en Romarón antes del GOU, especialmente su infancia y primera juventud. Con mucha documentación, Cloppet descarta muchas leyendas e historias apócrifas sobre Perón. La más notable es la que se repitió tantas veces respecto de su genealogía: muchos dijeron que la madre de Perón, doña Sosa, era descendiente de tehuelches y por lo tanto, Perón un líder con sangre india. Cloppet, que ya escribió un extenso volumen sobre la genealogía de Perón y de Evita, descarta totalmente esta historia con fechas y facsímiles de documentos.

Lo mismo con sus amores: varias páginas detallan las distintas pasiones amorosas de Perón. Las cartas a su tía Mecha Perón, con quien quería casarse. El amor por Potota Tizón, su muerte y la extraña relación que continuó con su cuñada, María. Los filos europeos durante su misión en Italia. El retorno a la Patria y la aparición de la mendocina “Piraña” Yurbel, aquella pebeta de 18 años que el Coronel Perón – ya de 48 – presentaba como su hija. Y cómo Evita las barrió a todas de un plumazo, con el mismo carácter que empuñó contra los enemigos del pueblo en defensa de sus descamisados.

Otros capítulos, quizás los menos polémicos pero los más interesantes, aportan elementos inéditos para conocer algo que hasta el momento estaba entre la fantasía y el silencio: qué hizo Perón en Italia a comienzos de la Segunda Guerra y qué impresiones le dejó el fascismo italiano. Algunas opiniones muy polémicas – pero tremendamente interesantes desde el análisis histórico – surgen de esas cartas italianas a su cuñada María Tizón. Sólo una muestra:

Llevo un mes de observación atenta a todo y a todos. Lo mejor de ITalia: Roma; lo mejor de Roma: lo histórico y el Vaticano; lo mejor del mundo: Buenos Aires… Lo mejor de Buenos Aires: sus habitantes, con todos sus defectos y macanas… La única desgracia que apreciamos en nuestro pueblo proviene del exceso de bienestar. Creo sin duda que estos países han llegado a un grado de organización, orden y trabajo, difícil de igualar por otros países que no tengan sus problemas y afligentes necesidades. Hoy he comprobado que la necesidad es un factor poderoso para hacer virtuosos a los pueblos. La historia ya me lo había mostrado en la descendencia de ORiente, Grecia y Roma, pero he necesitado verlo para darme cabal cuenta de que la abundancia no es buena escuela para la virtud, tal como la entendemos hoy. Con todo prefiero pertenecer a un pueblo sin necesidades, especialmente si ese pueblo es nuevo como el nuestro y tiene aún por delante un gran porvenir que forjar”.

Si quieren leer más, deberán buscar el libro. Cualquier peronista lo disfrutará, estando o no de acuerdo. Cloppet, por lo que evidencia este libro, sin dudas se habrá basado en algún documento. Y nacerá la polémica, otra excelente oportunidad para volver a Perón.


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