JUICIOS DE LESA HUMANIDAD. Gil Lavedra hace tabla rasa con los tratados internacionales refrendados por Argentina
POR CARLOS MARTIN AMAD (Fiscal General ante el T.O.C. de Salta)
Con motivo de las declaraciones publicadas en el Diario Infobae – dónde el Dr. Ricardo Gil Lavedra opinó que deben terminar los procesos por delitos de lesa humanidad, ya que se están juzgando a personas que llevan a los tribunales en silla de ruedas o usando pañales, me parece oportuno expresar las siguientes reflexiones. Ante todo, causan una profunda tristeza manifestaciones de esta índole, que desconocen los tratados internacionales signados por este país e incluso su propia historia cuando otrora formara parte del tribunal que juzgó en 1985 a la junta de los comandantes de la dictadura genocida.
También, debo señalar que la opinión de Gil Lavedra no es desinteresada: él es el abogado defensor del ex juez federal de Salta Ricardo Lona, acusado en múltiples causas por su participación en graves delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura cívico–militar.
Concretamente, Lona se encuentra procesado como partícipe necesario de los 11 homicidios de la “Masacre de Palomitas”, y por su actuación en la investigación del secuestro y desaparición del ex gobernador de Salta, Miguel Ragone. Ambos procesamientos fueron confirmados por la Cámara Federal de Apelaciones de Salta. A su vez, como se publicó recientemente en el sitio Fiscales.org.ar, en un tercer proceso que enfrenta Lona, la fiscalía amplió las imputaciones por los casos de 54 víctimas, que comprenden 23 homicidios y hechos de imposición de tormentos, privaciones ilegítimas de la libertad, entre otros delitos.
En su momento, la aparición de Gil Lavedra como defensor del ex juez Lona motivó la inmediata reacción y repudio de organismos de derechos humanos y del propio partido radical salteño, cuyos referentes pidieron la desafiliación de ese partido del ex diputado radical Gil Lavedra y que se le retirara el título de doctor honoris causa de la Universidad Nacional de Salta.
Flaca es la memoria del señor Gil Lavedra, ya que no dice ni cuenta que como abogado de Lona, lo único que ha hecho es impedir el avance normal de la causa recurriendo a todo tipo de maniobras dilatorias, a un sinnúmero de recusaciones y planteos de nulidades, dilatada y trabajosamente atendidas por los tribunales y finalmente rechazadas. Existe incluso un examen médico ordenado sobre Lona que hasta podría determinar una favorable morigeración de las consecuencias del proceso en su contra, y aun así, la defensa integrada por Gil Lavedra se opuso de modo inexplicable y sistemático a este examen.
Todo esto en nada se condice con la necesidad que expresa Gil Lavedra de terminar rápidamente con estos procesos y de evitar que los imputados sean llevados a juicio en males condiciones de salud. Vale recordar que en la causas “Ragone” y “Palomitas” Lona fue citado por primera vez a indagatoria en el año 2007, y que su procesamiento recién quedó confirmado por la Cámara Federal de Salta el año pasado, transcurridos 8 años de planteos defensivos.
Por último, cabe recordar que en la causa en la que recientemente se ampliaron las imputaciones, la Fiscalía requirió la indagatoria de Lona en agosto de 2006, y debido a planteos de su defensa, transcurrida ya prácticamente una década, el imputado todavía no se presentó a dar explicaciones por su actuación en los procesos judiciales que tramitaba durante el terrorismo de estado en la causa «Palomitas».
