A veces pareciera que no aprendemos más. Unos pocos meses antes de que Macri derrotara a Scioli luego de una sucesión de increíbles errores, jóvenes economistas del riñón del kirchnerismo planteaban tomar créditos argumentando que las tasas de interés eran bajas. Ahora, en medio de la pandemia y del pandemonio organizado por quienes conducen los medios y desde allí al hasta ahora disperso y fragmentado bloque antinacional, vuelven a escucharse voces favorables a, si es posible, seguir endeudándonos. El arquitecto Oscar Balestieri, que fue subsecretario de Vivienda de la gobernación de Antonio Cafiero, les sale al paso.
POR OSCAR BALESTIERI
A los pocos días de asumir el gobierno, Alberto Fernandez y el ministro Guzman, le contestaron al FMI (en relación a un tramo disponible de financiamiento): No tomaremos más deuda.
Esta definición, tajante, contiene muchos conceptos:
El primero, una actitud del gobierno: terminar con el ciclo de endeudamiento del macrismo o mejor dicho del gobierno neoliberal, ya que adjudicarle todo a Macri es una simplificación.
Segundo, que la economía debe generar recursos (y puede hacerlo) suficientes para impulsar el crecimiento, la justicia social y también la independencia económica.
Esta definición contundente de un gobierno indica un rumbo diferente. Sin embargo éste no parece haber sido adoptado por algunos sectores del propio gobierno.
Leemos y escuchamos, que se mencionan con esperanza la posibilidad de financiamientos internacionales, (CAF ,BID, etc.) para reactivar las obras de hábitat y vivienda.
Apoyo plenamente la posición del gobierno de NO endeudarnos más. La experiencia del endeudamiento global está a la vista: es la principal herramienta de la dependencia. Del condicionamiento de las políticas nacionales por el poder financiero internacional.
El principal argumento en favor de financiar obras públicas es que tienen interés bajo, lo que sirve para encarar obras que no se podrían hacer sin esos financiamientos para fines determinados…
El argumento del bajo interés es relativo, ya que como en todo financiamiento, hay costos ocultos (comisiones de compromiso del 1% o más, que se pagan aunque no se utilicen los créditos: lo habitual es que se tardan años hasta que se pueden utilizar) hay condicionamientos sobre quienes pueden hacer las obras, a quien se puede comprar… Todas condiciones políticas. Consultorías, misiones de contro, a las cuales se les paga sus gastos. «Gentilezas» que han llegado al extremo de pagarles “acompañantes”.
Además son un camino de captación de funcionarios nuestros, a quienes con el encandilamiento de futuros contratos por entes financieros, se los condiciona para que tengan una mirada complaciente.
Como en toda generalización, hay que encontrar, buscar los matices, posiblemente también en esos financiamientos haya diferencias: no es lo mismo el FMI que los bancos chinos que financian las hidroeléctricas de Santa Cruz, siempre es un endeudamiento, pero hoy el “imperialismo “ chino tiene condicionamientos menores y la necesidad política de una potencia en ascenso y en competencia con el poder financiero internacional, hace que ofrezca condiciones más favorables.
El gran economista Aldo Ferrer planteaba la consigna “vivir de lo nuestro”, como objetivo de independencia económica y soberanía política. Está plenamente vigente, y la respuesta del Gobierno al FMI, se alinea con ese objetivo: No endeudarnos más.
Redacté el TUIT sobre la ventana que no me abría el espacio para comentario y mágicamente se permite ahora. Evidentemente es mejor no endeudarse a fin de cumplir con la deuda nacional. Si el poder JUDICIAL, corresponsable del GASTO, no hace nada para poner las cosas en su lugar legalmente y condenar los ROBOS e inútiles gastos como los PAGOS a los grandes empresarios de MENTIRAS, así se diga fake news para atenuar el significado, PAGAR para MENTIR al pueblo con su PROPIO DINERO es un DELITO, comprar ambulancias que no se usaron, MALVERSAR el FGS de Anses y muchas IRREGULARIDADES cometidas, con CS de Justicia, nacional y provinciales, Macri SÍ es RESPONSABLE junto con su gabinete de la DEUDA enorme que se intenta «esatatizar», a eso sumemos la pandemia y el costo de ello. Macri no hizo obra pública, no gastó en SALUD ni en EDUCACIÓN, como regla general, DESPIDIÓ trabajadores, entregó las toneladas del ORO reserva, compradas por N y CFK, al UK, y ¿se pretende que «ALGO» «MISTERIOSO» había? El país estaba desendeudado como repitieron Macri y sus funcionarios, por eso pudo PEDIR a troche y MOCHE. Se trató de llegar y se logró al Ejecutivo MINTIENDO, y eso lo saben los GORDOS sindicalistas. El pueblo está esperando que el poder judicial haga su trabajo. Se necesitan hospitales, viviendas, cárceles y si no hay dinero y hay que pedir porque se requiere crear más trabajo, viviendas, escuelas y establecer el CONSUMO -que es POPULAR, no «POPULISTA»- normal de lxs argentinxs se tendrá que hacer porque la sociedad no aguanta más, y claro que no fue «CANTO de nada irreal, fue hacer lo que se le CANTÓ con plata AJENA.