BOLIVIA. El protagonismo de la OEA en el golpe de Estado al desnudo
La OEA, con la conducción de un cipayo abyecto, el uruguayo Luis Almagro (fotos), tuvo gran protagonismo en el Golpe de Estado que tumbó al gobierno legítimo de Bolivia. Que, de hecho, no hubiera podido consumarse sin ella. Hay que tener muy mala fe para negarlo. Por suerte, ante la avalancha ensordecedora de los medios hegemónicos, vasallos del Imperio, se alza la claridad de la vicedirectora de Russia Today en castellano, Inna Afinogenova, que explica su ingerencia con pedagógico sarcasmo. Más claro, imposible.