Murió el ex gobernador Jorge Cépernic, un patriota
En base a material tomado del diario Tiempo Sur a través de la página web del diario La Jornada, y de un comunicado de Dypra.
Don Jorge Cepernic consagró su vida a la actividad política, entre otras, habiendo accedido, a través del sufragio popular, al cargo de gobernador de Santa Cruz en el año 1973. Se trataba de un histórico dirigente peronista quien hizo su vida política en la Patagonia, en épocas en que los inviernos parecían más gélidos y las distancias más grandes.
Fueron tiempos difíciles en la argentina y Cepernic formó junto a los mejores. Al llegar la dictadura militar fue detenido y pasó cinco años preso en el penal militar de Magdalena a disposición del PEN (Poder Ejecutivo Nacional) sin que se le formularan cargos.
Antes de ponerlo en libertad, un jefe militar le dijo que su larga prisión se debía a que habia facilitado la filmación de la película «La Patagonia Rebelde», otorgando un préstamo y recomendando sitios de la provincia de Santa Cruz para las tomas en exteriores.
Un acotado resumen de un hecho de su vida que lo pinta de cuerpo entero aparece en la Biblioteca Provincial Juan Hilarión Lenzi:
«El Sr. Jorge Cepernic siempre fue un apasionado de los temas santacruceños y se ha ocupado de recoger información sobre los hechos de las huelgas patagónicas mucho antes de que el tema cobrara importancia en los años setenta. Colaboró en la investigación de Osvaldo Bayer e incluso apoyó la filmación de la película en territorio de Santa Cruz. Llegó a ser gobernador de la provincia de Santa Cruz por elección popular en 1973. Cuando ya estaba por concretarse el proyecto de monumentos en las tumbas de caídos en las huelgas (incluso con el apoyo de antropólogos de universidades nacionales) el golpe de estado de 1976 lo suspendió en sus funciones y lo encarceló. Estuvo cinco años presos y según un alto oficial del ejército fue por colaborar en la película ‘La Patagonia Rebelde’ al no suspender la filmación en territorio santacruceño según una orden de los ‘altos mandos'».
En el año 1981 no le dan la libertad pero sí lo regresan a Santa Cruz para cumplir todavía varios meses de arresto domiciliario. El militar que le avisa de esta decisión le dice que fije el inmueble en que deberá seguir arrestado. Don Jorge tenía dos lugares para optar: su sencilla y cálida casa típica de chapas en la ciudad de Río Gallegos, o la estancia que tenía en pleno campo. Allí a Don Jorge se le ocurrió que al elegir el campo en medio de la nada estaría tranquilo y seguramente sin vigilancia. Se equivocó. Le asignaron tres policías pero de la provincia de Santa Cruz.
Jorge Cepernic había dejado de aparecer públicamente en los últimos meses, situación que se profundizó con la desaparición física de su esposa Sofía Vicic, ocurrida en el mes de mayo pasado. Su muerte deja un legado de historia viva de la Santa Cruz del siglo XX, que fue motivo de varios homenajes a lo largo de los años.