Repudiamos la Operación Stiuso

Lo que no lograron hace un año con la denuncia del fiscal Nisman contra la expresidenta, el ex canciller y otros ex funcionarios, lo están intentando ahora con la Operación Stiuso, en el contexto “amigable” generado por el​ nuevo gobierno de una derecha revanchista. De mínima, un culebrón para ocultar la claudicación frente a los fondos buitres, los despidos, los tarifazos y el incontenible aumento de todos los precios; de máxima, ver a la expresidenta desfilando por los tribunales de Comodoro Py y, si fuera posible, encarcelada, Lanata dixit. Cualquier parecido con lo de Lula en Brasil no es pura coincidencia: forma parte del plan del imperio para quebrar las experiencias populares de la Patria Grande.

Una declaración de más de ocho horas donde Stiuso afirmó que a Nisman lo mataron, sin ningún aporte probatorio, tal como lo reconoció el abogado del ex espía Blanco Bermúdez. Una maniobra en la que abundan las interpretaciones y las opiniones personales; he aquí el pretexto en que se basó la jueza Palmaghini para declararse incompetente y pasar la causa a la justicia federal, tal como venía insistiendo la querella de la jueza Arroyo Salgado. ¡Todo esto luego de que apenas tres semanas antes Palmaghini rechazara trasladar la causa al fuero federal manifestando en un dictamen que no había pruebas que permitan afirmar que a Nisman lo mataron y que esto sólo estaba en los deseos de la querella!

Llama poderosamente la atención que Palmaghini, con muchos años en la justicia, haya tolerado una declaración testimonial de tantas horas con opiniones e interpretaciones sin pruebas concretas de sus aseveraciones. Los testigos deben testimoniar lo que saben y no opinar mi interpretar; en todo caso, ésta es la función de los peritos. Un escándalo mayúsculo que pone otra vez en tela de juicio a un sistema judicial federal infiltrado por los servicios. El periodista de Clarín Gerardo Young, autor del libro Código Stiuso, afirmó en un reciente reportaje en Radio Mitre que “la SIDE ponía jueces en la justicia: uno fue Luis Rodríguez y la otra Sandra Arroyo Salgado” y que “él (Stiuso) está queriendo direccionar la causa hacia el juez federal Luis Rodríguez que es compadre de Jaime Stiuso, es el padrino de la última hija de Stiuso, y a su vez es el padrino de uno de los hijos de Luis Rodríguez. Efectivamente Stiuso quiere llevar la causa a lo de Luis Rodríguez para manejarla” a su antojo. Opinión coincidente con la del exfiscal del juicio a las juntas Moreno Ocampo, vertida en Intratables en América TV. y que le valió una brutal apretada en vivo del exespía.

Mientras tanto, los dirigentes de las autodenominadas “entidades centrales” permanecen“expectantes y cuidadosos” como lo afirmara en un reportaje radial el presidente de la DAIA. Cuando la inmensa mayoría de los periodistas, juristas y conocedores de los vericuetos oscuros de la inteligencia se pronuncian denunciando la Operación Stiuso, los que dicen ser los representantes de la comunidad judía, que durante todo el tiempo se la pasaron homenajeando al fiscal muerto, sólo tienen para ofrecer el silencio.

Desde el LLAMAMIENTO Argentino Judío convocamos a repudiar y denunciar esta vil maniobra que, además, forma parte del intento de llevar al cierre a la causa AMIA. Éste es nuestro compromiso con las víctimas del atentado en nuestra inclaudicable búsqueda de memoria, verdad y justicia.

Jorge Elbaum – Presidente

Marcelo Horestein – Secretario