LESA HUMANIDAD. Ofensiva de los reivindicadores del Terrorismo de Estado y acampe en Tribunales
Dos noticias íntimamente relacionadas. ¡Vayamos todos al acampe frente a los Tribunales porrteños!
Lo dijo en un cónclave en el que también desbarró Graciela Fernández Meijide
Para el historiador Romero»no está claro»que el Terrorismo de Estado haya sido peor que la guerrilla
- (Por Juan José Salinas).-En un suelto publicado por La Nación como parte de la campaña que pretende acabar abruptamente con los juicios por crímenes de lesa humanidad perpetrados durante la dictadura, el historiador Luis Alberto Romero, columnista del diario, desciende a las máximas simas de la abyección (de seguir así, se topara en el último sótano del infierno con Ramón Camps, Luciano Benjamín Menéndez y otros genocidas) al decir que «No es claro que el Terrorismo de Estado haya sido peor que lo que hicieron las organizaciones armadas», cuando aún según las cifras esgrimidas por quienes reivindican el Terrorismo de Estado, la represión habría hecho tronar el escarmiento matando a más de diez «subversivos» por cada muerto atribuido a las guerrillas (alrededor de 8.000 contra 800).
Guerrillas surgidas -es bueno no olvidar- para enfrentar a una dictadura militar, la de la «Revolución Argentina», que luego de haber suprimido toda manera de actividad política planteaba gobernar el país durante décadas.
Esto sea dicho sin perder de vista lo principal: que sólo son imprescriptbles los crímenes cometidos por los estados.
A la abyección palmaria del pequeño Romero, se suma el extravío de la profesora Graciela Fernández Meijide, cuyo odio por los militantes que admiraba su hijo detenido-desaparecido por lo visto es mucho más persistente y feroz que el que dispensa a sus verdugos.
La crónica de La Nación, dedicada a un cónclave realizado en la elitista Universidad de San Andrés (la semana pasada se había realizado otro en la Universidad Católica de Puero Madero con el auspicio del obispo Alcides Jorge Casaretto) comienza con una frase suya que no tiene pies ni cabeza, y que la empareja con la diputada Carrió, capaz de decir cualquier cosa con total impunidad:
«Durante la dictadura me iba a dormir pegándoles un balazo en la cabeza a Agosti, Massera y Videla. Me obligaron a matar a mi hijo asumiendo que estaba muerto».
Sabrá ella que quiso decir. En cualquier caso, suena macabro.
En la reunión, un aquelarre (con perdón de los antiguos brujos y brujas de Euskalherría) de procesistas impenitentes como el banquero Emilio Cárdenas (ex embajador de Menem en la ONU y ex vicepresidente ejecutivo del HSBC) se dijeron naderías solemnes como que los juicios se hacen en base a las evidencias recolectadas por la CONADEP sin que haya habido luego esfuerzos por mejorarlas.
Lo dijo la abogada Verónica Blanco, defensora de los represores juzgados y enemiga declarada de los organismos de Derechos Humanos, obviando aportes de envergadura como los producidos no sólo por las investigaciones judiciales sino también hechas en por periodistas y hasta por militares, como los hermanos Federico y Mittelbach y el capitán José Luis D’Andrea Mohr, autor de investigaciones tan relevantes como las plasmadas en sus libros «Obediencia de Vida» y «El batallón perdido» (el primero permitió identificar a los responsables por acción u omisión de todos los secuestros, y el segundo avanzar sustantivamente en el tema de los soldados conscriptos asesinados por sus jefes).
La profesora Rosa Graciela Castagnola de Fernández Meijide, autora de un libro con título plagiado a otro anterior de un jerarca de la dictadura («Derecho a la esperanza», con prólogo de Beatriz Sarlo, escrito a cuatro manos con Santiago Kovadloff), parece haber perdido definitivamente el rumbo.
Lean abajo la breve crónica. A La Nación se le cayó la careta. Tanto, que hay un extendido rumor que uno de sus editorialistas es el convicto Jaime Smart, ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires durante la dictadura. ¿Será él quien escribe estos dislates?
http://www.lanacion.com.ar/1820609-cuestionan-el-procedimiento-de-los-juicios-por-lesa-humanidad
Juicios como los iniciados contra Mercedes Benz y Ford están en punto muerto
Llonto alertó sobre la impunidad empresarial y exhortó a participar en el acampe frente a Tribunales
- El abogado y periodista Pablo Llonto sostuvo hoy que las causas contra empresarios imputados por delitos de lesa humanidad «están en situación grave» y exhortó a participar del acampe «contra la impunidad» que se extenderá del viernes al lunes próximos en Plaza Lavalle, frente al Palacio de Tribunales.“Las causas contra empresarios están en situación grave. Lo que pasó este año, varios fallos, es un mensaje de sectores del Poder Judicial de querer poner un límite: no se puede avanzar sobre todo contra grandes empresarios”, dijo Llonto a Télam en una entrevista realizada hoy. Desde Jujuy. Inés Peña confirmó su asistencia.
Llonto fue entrevistado al margen de la reunión de la Mesa de Discusión realizada hoy a instancias de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad.
Desde que se conocieron aquellos esos fallos, en febrero y marzo, “la situación no ha mejorado y en julio la delegación nuestra de los abogados de lesa humanidad le planteó al presidente de la Corte (Ricardo Lorenzetti, que los recibió) este punto como uno de los graves inconvenientes que hay en los juicios de lesa humanidad”, agregó Llonto, abogado de numerosas querellas en causas por crímenes del terrorismo de estado.
“Si bien estas son decisiones de jurisdicción (los fallos cuestionados) y no se resuelven con una ley ni con una acordada, entendemos que hay que dar un campanazo fuerte en la Corte y en todos los lugares donde se pueda», en rechazo «a esos sectores conservadores del Poder Judicial que evidentemente están lanzados a impedir el juzgamiento de empresarios».
En el caso más emblemático, en julio pasado abogados querellantes en causas de lesa humanidad, incluido Llonto, hicieron una presentación ante el Consejo de la Magistratura, por la falta de mérito con que el empresario Carlos Blaquier fue beneficiado por la Sala IV de la Cámara de Casación Penal en dos causas por crímenes de lesa humanidad cometidos hace cuatro décadas.
«Medio centenar de abogados firmamos un pedido de juicio político para los integrantes de esa sala de la Casación ante el Consejo de la Magistratura, que debería resolver rápidamente y el lunes va a haber una reunión de la Comisión Interpoderes en la que también va a salir este tema”, resumió.
El grupo prepara ahora “presentaciones de cada uno en su jurisdicción, para marcar claramente que los empresarios tienen que ser indagados, tienen que ser procesados y tienen que ir a juicio oral”.
Además de “los más conocidos, como Blaquier, (el empresario periodístico Vicente) Massot, Herrera de Noble y Magnetto (ambos en la causa Papel Prensa), hay una gran cantidad de empresas en las que no se avanza, como Mercedes Benz, las metalúrgicas de la zona norte” del Gran Buenos Aires, entre otras donde fueron secuestrados gran número de delegados de base y activistas durante la última dictadura.
Llonto aludió al caso de la “Ford, que está en una cola para ir a juicio. Se supone que el año que viene va comenzar el juicio oral contra tres directivos de la Ford» por la coautoría o complicidad de esa compañía automotriz en el secuestro de trabajadores de su planta en Pacheco, en el norte del Conurbano bonaerense.
«Estamos ya terminando el 2015 y todavía en la Argentina no hay un empresario condenado. En situación de juicio está (Marcos) Levín, el empresario de La Veloz del Norte y probablemente los de Ford», resumió.
En este marco, invitó a sumarse a «la carpa por el tema de Blaquier frente a Tribunales, en Plaza Lavalle, que va a estar hasta el lunes, con actividades a la mañana y a la tarde”.
“Estamos convocando para que todos vayan en algún momento, para que esa carpa se convierta también en un símbolo fuerte contra este sector del Poder Judicial que evidentemente no quiere que sea juzgado el poder económico cómplice del terrorismo de estado”, concluyó.
Desde Jujuy
Inés Peña, referente de Madres y Familiares de detenidos-desaparecidos de Mayo de Jujuy, confirmó hoy el acampe «en repudio de la impunidad de los grandes empresarios» imputados por delitos de lesa humanidad, que se extenderá desde mañana hasta el lunes próximo en Plaza Lavalle, frente al Palacio de Tribunales, en la ciudad de Buenos Aires.
«El viernes a las 14 nos vamos a reunir organismos de derechos humanos, sociales y populares en Plaza de Mayo para marchar hacia Plaza Lavalle», dijo Peña al margen de la reunión realizada hoy por la Mesa de Discusión auspiciada por la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad.
El mismo viernes, además de la instalación de la «Carpa contra la impunidad», están previstas actividades culturales y artísticas.
Para el sábado fueron programadas en la mañana una conferencia de prensa, videos, presentación de libros y charlas, y por la tarde otras actividades artístico-culturales, igual que el domingo y el lunes en horas de la tarde.
“La impunidad que estamos viendo favorece especialmente al poder económico que fue parte del terrorismo de estado, como es el caso de Carlos Blaquier, dueño del ingenio Ledesma”, explicó Inés Peña.
La referente jujeña precisó que el acampe finalizará el lunes, después de la reunión de la Comisión Interpoderes creada en el 2008 por la Corte Suprema para agilizar los juicios por crímenes de lesa humanidad pero que luego fue perdiendo impulso y este año no se había reunido nunca.
“Preocupados por la impunidad de los empresarios y por lo que vemos venir propusimos esta forma de reclamo», explicó Peña sobre el acampe.