PERIODISMO. Como en el caso Assange, en la demanda contra Santiago O’Donnell está en juego la existencia misma del oficio
Más allá de las diferencias de enfoque e ideológicas que tengo con él, Santiago O’Donnell ha sido el periodista que mejor ha entendido –y obrado en consecuencia– que la suerte de Julián Assange es y será la de nuestro vapuleado y prostituido oficio. Ahora es él el objeto de una demanda judicial absurda, que de prosperar pondría en la picota (y en el cepo, con las manos inmovilizadas) el desempeño del ya de por si «violento oficio de escribir» al decir de Rodolfo Walsh. No hace falta ser jurista para entender que desde que se modificó la ley, hace falta probar que uno ha dicho o escrito algo falso con la manifiesta intención de perjudicar a terceros (real malicia) y que no es obligatorio grabar en audio las entrevistas (García Márquez recomendaba que nos contentásemos con tomar notas). Es una ley que al mismo tiempo nos ha aliviado (tuve muchos juicios antes de ella, ninguno después) y tiene el indeseado efecto colateral de facilitar la proliferación, ya no sólo de opineitors y adjetivadores e insultadores compulsivos, sino también, lo que es peor, la impunidad de calumniadores e injuriadores seriales.
Quizá Mariano Macri se haya doblegado ante la presión de Mauricio; quizá al hacerle confidencias a Santiago haya querido obtener algo de su hermano mayor y esté arrepentido por no haberlo logrado, o habiéndolo logrado haya tenido que hacer su parte, lo cierto es que por el motivo que fuere aparece arrepentido de haber traicionado la omertá y busca afanosamente algo que le permita desdecirse. Para lo que pretende que se lo autorice a salir en una «excursión de pesca» en procura de algo, cualquier cosa que le permita poner en cuestión, en tela de juicio, lo escrito por el autor, o cuando menos relativizarlo.
El libro «Hermano» causó gran impacto, no tanto por los chanchullos del ex presidente (que ya en su campaña electoral pedía a los empresarios el 1 % del valor de sus empresas, prometiéndoles a cambio un espléndido resarcimiento cuando llegara a la Casa Rosada) sino por la desaprensión y crueldad manifiesta con su propia familia.
Considero un deber moral y un acto de autodefensa adherir al pedido que ha hecho Santiago (véase al final de su texto, escrito en tercera persona). Solidaricémonos con él y repudiemos un fallo judicial tan inconstitucional como absurdo.
Pentiti Mariano y capi famigliae Mauricio.
Dice el refrán castizo: Dónde dije «digo» digo «Diego»
Jueza venal autoriza a Mariano Macri a una «excursión de pesca» en procura de algo que le permita desdecirse
Una medida del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil No. 6 a cargo de la doctora Susana Margarita Gastaldi notificada el martes pasado le ha ordenado al periodista Santiago O´Donnell que le entregue a Mariano Macri todas la grabaciones de las entrevistas que derivaron en la escritura de su libro “HERMANO La confesión de Mariano Macri sobre la trama de poder, política, negocios y familia detrás de su hermano Mauricio” en un plazo de cinco días hábiles, o pagar una fuerte multa diaria en caso de negarse.
La medida le fue notificada al periodista sin que antes se le avisara que era sujeto de una demanda iniciada en dicho juzgado a fines del año pasado. El objetivo de la medida, según escribió el requiriente al solicitarla, es “brindar certeza a la preparación de un ulterior juicio por daños y perjuicios.”
En las grabaciones hay consideraciones del periodista no divulgadas. También menciones a terceras personas, circunstancias, opiniones y situaciones que el autor eligió no incluir en el libro por una variedad de razones que hacen a la buena praxis periodística. La historia ha demostrado que contenidos reservados de trámites judiciales se han filtrado por distintas vías y no solo medios de comunicación.
Se trata de una medida claramente inconstitucional, violatoria del derecho a la libertad de expresión y el derecho a la preservación de la fuente. Además viola estándares internacionales, poniendo al Estado ante una causal de responsabilidad internacional, por lo que ha sido denunciada ante la Relatoría Especial de Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Esta insólita resolución habilita una “excursión de pesca” para ver de qué manera se puede dañar, intimidar o castigar al periodista por haber revelado información sensible y de evidente interés público acerca de uno de los hombres más poderosos de Argentina. De quedar firme se vería seriamente amenazado no solo el libre ejercicio de informar a través de un medio de comunicación, sino también el derecho de la sociedad a ser informada.
Por lo tanto rechazo la medida adoptada por la Dra. Gastaldi y llamo a Su Señoría y/o a las autoridades judiciales competentes por apelación a revertir esta medida y a respetar las garantías fundamentales para el ejercicio del oficio periodístico.
ADHESIONES a santiod@yahoo.com.ar
pajaro, está en tercera persona porque es un texto que arme con mis abogado cristian del rosario y damian loretti para atraer adhesiones de periodistasprestigiosos como vos, juristas y académicos del periodismo. por eso te pido que le saques mi firma ya que es algo colaborativo. te agradezco el apoyo y te mando una abrazo.
AHÍ te das cuenta el poder, ese es el poder, x algo nadie ningun juez se atreve a llamar a declarar.nos dejo a los Argentinos desplumados.
Son una mafia. Y esto es solo una muestra de lo que son capaces de hacer si alguien se les interpone.
Fuerza! Fuerza! Fuerza Santiago O’donnell
El periodista no sometio a Msriano. Si su ambivalencia es muy grande q se analice.
Es una muestra de la mafia judicial macrista